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El Secretario General de la Unión Sindical Obrera de España visitó Incasur

Julio Salazar, recientemente reelegido al frente de esa Central Obrera, visitó nuestra casa y realizó un análisis del escenario sindical de su país en el contexto de la crisis europea.

Incasur abrió sus puertas nuevamente a la llegada de Julio Salazar, Secretario General de la USO (Unión Sindical Obrera) de España. Ramón Ermácora, Director General de Incasur, y Ricardo Alvarellos, Coordinador y responsable de capacitación, lo recibieron para analizar la situación social, política y económica de los sindicatos en su país, y planificar acciones de colaboración conjunta entre ambas instituciones.
La Unión Sindical Obrera es una central sindical española fundada en los años 1950 que alcanzó una notoria presencia durante la Transición. Actualmente, es la tercera fuerza sindical de ámbito nacional español tanto en número de afiliados como por delegados sindicales.
Julio Salazar ha sido recientemente reelegido al frente de su Central con el apoyo del 92,47% de los 300 delegados asistentes al X Congreso Confederal que se ha celebrado en Sevilla.
Visitó la Argentina para participar del congreso de la Central de Trabajadores de la Argentina, que tuvo lugar en Mar del Plata. Pero, además, según sus propias palabras, aprovechó su viaje para “visitar a los amigos de Incasur”. “Con Ramón ya son muchos años de amistad y participación conjunta”, señala el dirigente.
¿Hace cuánto que tiene relación con Incasur?
Hace décadas. Desde nuestra presencia y entrada en la Confederación Mundial del Trabajo, en la década del ochenta. Después de ahí, realizamos todo el trabajo con la CLAT (Central Latinoamericana de Trabajadores) y, dentro de ella, el trabajo que se hace para la formación sindical. En una Central como la nuestra, que es autónoma e independiente, tienes que marcarte tus propias estrategias, y para nosotros siempre fue central el tema de la formación porque es la columna vertebral del sindicato. Fue a partir de allí que tuvimos todos los contactos fraternos e intensos con lo que fue la UTAL (Universidad Latinoamericana) y con todos los centros regionales como el Incasur.
¿Cómo ve el escenario sindical en España?
Es muy complicada la situación actual porque la crisis económica ha golpeado muy fuerte al país, en todos los sentidos. Por salvar la moneda y la banca, muchas personas fueron condenadas al paro y a una desigualdad social terrible. La clase media prácticamente desapareció, y muchas personas están pasando a la clase baja, que ya perdió un 33% de los ingresos, mientras que los ricos no perdieron nada y subieron un 13%. Por otro lado, las estrategias políticas han decidido gobernar por Decreto Ley sin escuchar al Parlamento ni al pueblo y, por lo tanto, ningunear a los sindicatos frente a posibles negociaciones.
Se llevaron a cabo dos reformas laborales en los dos últimos años y siempre han sido para machacar el derecho del trabajo y el estado social que se está descomponiendo no sólo en España, sino en todo el territorio europeo afectando a la Central Sindical. Desde nuestra organización, por propia convicción, siempre se llamó a intentar organizar la unidad del movimiento sindical a pesar de que hay diferencias muy importantes, pero, ante esta situación de crisis, hemos logrado conformar una unidad sindical entre las tres grandes centrales sindicales: la nuestra, la CGT y la Confederación de Comisiones, con 150 organizaciones sociales para conformar la Cumbre Social.
Esta Cumbre Social ha sido últimamente protagonista en la huelgas generales y grandes marchas y manifestaciones que hicieron en los últimos años, desde que en el gobierno de Zapatero se promulgaron los primeros decretos en contra de los Derechos Sociales y Sindicales hasta todas las últimas actuaciones que ha venido haciendo el gobierno de Rajoy. En estos días, estamos llevando a más de 60 manifestaciones en toda España, y hay una euro manifestación en Bruselas. Todas las manifestaciones tienen un mismo propósito: exigir a las autoridades y al parlamento que de una vez por todas dejen las políticas de ajustes y austeridad, ya que han sido de recortes de derechos civiles y laborales. Se tienen que hacer políticas de recuperación económica y del empleo. Se han puesto sobre la mesa planes de recuperación y lucración económica que destinen el 2% del Producto Interior Bruto para esos fines.
¿Cómo repercute todo este escenario en la actitud de la gente hacia la política?
La ciudadanía europea está muy afectada por lo que es el “euroescepticismo”, por un lado, y la “eurofobia”, por otro, que desencadena la formación de nuevos partidos políticos, como la extrema derecha neonazis. También, surgen partidos de centro-izquierda que seguramente quiten votos a los grandes partidos como el Popular y el Socialista, que están actualmente gobernando en los principales países europeos y en el Parlamento europeo.
Y por primera vez, la configuración del propio Parlamento europeo va a tener mucha mayor importancia porque se le darán nuevas competencias como para componer una nueva comisión europea que esperemos que de una vez por todas ayude a combatir estas nefastas políticas que se vienen haciendo y que ya fueron puestas en práctica en América Latina por más de dos décadas.
Sabemos que afortunadamente ustedes terminaron con ellas y por ello vivieron en parte la recuperación del empleo y algunos derechos perdidos que cuesta mucho recuperar. Nosotros, en cambio, tenemos que terminar con estas políticas para empezar a reconstruir todo lo perdido.